
GRACIAS miles...
A las Marces por armar una comunidad tan linda y enriquecedora; generadora de imagenes y contenido inspirador. Por mantener despierta y activa nuestra creatividad y proponernos estos desafíos que nos invitan a superarnos..
A Paz por tan generoso premio! - Hasta hoy nunca había fantaseado con tener una silla Acapulco en casa.. y ahora no imagino mi living sin una de ellas! :) Me volví fan nro.1!! y estoy arrastrando a varios conmigo jeje
A uds, por leerme, acompañarme y por tanto apoyo!! - Gracias por todos los comentarios que dejan en el blog y mails. Que LINDO saber que estas del otro lado!
Mi subconsciente ya tenía archivada una imagen de estos trillos. Había visto uno hace unos cuantos años en el living de una coleccionista de arte y quedé embobadísima. No tenía ni idea qué era.. pero fue amor a primera vista!! Se lo habían traído de un viaje a España.. era una antigüedad.. servía para separar el trigo de la paja.. DIVINO pero imposible -pensé- Y gracias a esas vueltas de la vida me equivoqué! iupiii
Y el tiempo pasó.
Hace unos años viajamos a Turquía -lugar ampliamente recomendado- recorrimos bastante: Istanbul, Selçuk, Bodrum, Marmaris, Fethiye, Pamukkale y Capadocia. Y qué creen que me fui a encontrar en nuestro último destino??
Y el tiempo pasó.
Hace unos años viajamos a Turquía -lugar ampliamente recomendado- recorrimos bastante: Istanbul, Selçuk, Bodrum, Marmaris, Fethiye, Pamukkale y Capadocia. Y qué creen que me fui a encontrar en nuestro último destino??
Paisajes muy distintos entre sí -mezquitas, bazares, lámparas con espejitos de colores, plantaciones de olivos, ruinas, historia -mucha historia-, ciudades subterráneas, playa, parapente, anfiteatros, terrazas blancas de aguas termales, iglesias y monasterios- y todos, acompañados por el mismo hipnotizante canto. La llamada a la oración se mezcla con los demás sonidos de la ciudad o el silencio del atardecer y lo cotidiano, se vuelve mágico...
Göreme es el nombre de una serie de valles de la región de Capadocia. Una gran escultura de la naturaleza con caprichosos picos producto de años de erosión.
El pueblo es chico y sus construcciones se mimetizan con el entorno. Muchas de ellas, escarvadas en la roca; otras, íntegramente cubiertas por alfombras.
Y en un rincón algo alejado nos esperaba, de brazos abiertos, el paraíso... jaja
Felicidad máxima cuando encontramos este bolichito y aún más cuando preguntamos el precio y sonó bastante módico. Sonrisa de oreja a oreja. Enseguida pensamos: nos lo llevamos! Pero pequeño pedazo de bártulo no entraba en nuestras valijas, ni bajo el brazo. Averiguamos para pagar un bulto extra y llevarlo con nosotros en el avión.. pero no nos daban las medidas max. permitidas.
Y entonces qué hacemos??? Santi lo quería llevar igual y hacer el intento de despacharlo en avión. Perdido por perdido prefería jugarse y ver que pasaba. Yo no podía asumir el riesgo de tener que abandonarlo, sin más, en caso de la temida negativa. Moría de angustia si llegábamos tan lejos y después teníamos que dejarlo ahí abandonado.
Sabíamos que la opción de mandarlo era saladita pero de todas maneras teníamos que sacarnos la duda. Como siempre el tiempo nos corría y en un par de horas nomás ya volvíamos a Istambul y de ahí a casa.
Marido apeló a cuanta mímica se le ocurría para hacerle entender al sr vendedor, que no hablaba la mas mínima palabra de inglés, que pretendíamos llevarnos el trillo para que nos cotizaran el envío y sólo entonces decidir si lo comprábamos o no. Gracias a los dotes actorales del hombre logramos que el vendedor se ofreciera a alcanzarnos en auto, junto con el trillo, hasta el DHL más cercano para entonces poder pesarlo y medirlo como correspondía.
Salado! un hecho. Pero viste cuando uno tiene la idea fija en la cabeza? Bue.. algo así nos estaba pasando. Negociamos con el vendedor del trillo usando como intérprete al vendedor de encomiendas. Y después negociamos con este último usando, como único instrumento, nuestra simpatía :)
Dícese que el hombre tenía un amigo que nos lo podía hacer llegar alguito más barato. Y confiamos! Sin recibo ni boleta, sólo su nombre, mail y un teléfono escrito en un pedacito de papel.
Ya en Buenos Aires mandamos mail para coordinar la entrega, volvimos a mandar mail porque no teníamos novedades, llamamos por telefono, y volvimos a insistir... Hasta que finalmente logramos hablar y el buen hombre nos insistió en que no nos preocupáramos, que en cuanto pudiera se iba a ocupar de nuestro envío. Esperamos con paciencia y los dedos cruzados -por las dudas-, y llegó!!!!!!
Desde entonces nos acompaña y lo seguirá haciendo. Este trillo tiene, todavía, muchos kilómetros por delante.
Ya en Buenos Aires mandamos mail para coordinar la entrega, volvimos a mandar mail porque no teníamos novedades, llamamos por telefono, y volvimos a insistir... Hasta que finalmente logramos hablar y el buen hombre nos insistió en que no nos preocupáramos, que en cuanto pudiera se iba a ocupar de nuestro envío. Esperamos con paciencia y los dedos cruzados -por las dudas-, y llegó!!!!!!